La Luz de la Paz de Belén es una iniciativa que desde 1987, llevan a cabo los Scouts Católicos de Austria. Cada año un niño/a austriaco viaja a Belén, a la Basílica de la Natividad, y en una de las muchas llamas que se mantienen siempre encendidas alrededor de la estrella que marca el lugar del nacimiento de Jesús, enciende una vela, cuya luz se hará llegar a todos los países de Europa y de otros continentes.
A España llega cada año a una ciudad, este año a Santander, y desde aquí se reparte para alumbrar parroquias, hogares, hospitales, residencias y asociaciones de pueblos y ciudades de toda España...
La idea es que esta lucecita suponga un poco de paz y alegría en estas fechas, y que se comparta con todos los que están cerca de nosotros.
Este año, Manos Unidas ha querido sumarse a esta iniciativa y así, por medio de las Hermanas del Pilar, hemos recibido la Luz de la Paz de Belén que estará en Huesca, en la parroquia de Santo Domingo y San Martín.
La Luz se entregó el sábado 24, Nochebuena, en Misa de Gallo a las 12 de la noche. Y el 25, día de Navidad, en misa de 12 y de 1. Ayer llegó también a nuestra parroquia de Santiago Apóstol.
Las velitas, con un pequeño donativo, se podrán recoger, encender y llevar a los hogares oscenses. Estos donativos ayudarán a mujeres que, como la Virgen Maria, no pueden acceder a los cuidados prenatales necesarios. Son más de 830 mujeres embarazadas y sus bebés en 5 pueblos beduinos y campamentos de refugiados en el desierto de Judea. También podrán tener asistencia pediátrica más de 410 niños.
Con este sencillo gesto, la Luz de la Paz de Belén llevará luz y esperanza a comunidades y familias de muchos proyectos que Manos Unidas lleva a cabo en los lugares más empobrecidos de la Tierra.